En el segundo día de la COP 16 se anunció la adhesión de nuestro país a este Acuerdo Internacional que apuesta a la conservación y uso sostenible de semillas claves para la seguridad alimentaria.
Colombia se convirtió en el miembro número 153 del Tratado Internacional de Recursos Fitogenéticos para la Alimentación y la Agricultura (TIRFAA). De este Tratado forman parte Japón, Austria, Bélgica, Francia, Egipto, Dinamarca, Estados Unidos, Suiza, Emiratos Árabes Unidos y Canadá, entre otros países, incluidos los de la Comunidad Andina.
En un paso significativo hacia la conservación de la biodiversidad agrícola y la seguridad alimentaria, Colombia ha ratificado su adhesión al Tratado Internacional de Recursos Fitogenéticos para la Alimentación y la Agricultura (TIRFAA), convirtiéndose en el miembro número 153 de este importante instrumento internacional.
El anuncio se realizó durante el foro ‘TIRFAA, una herramienta para avanzar en la implementación de los objetivos del Convenio sobre la Diversidad Biológica’, moderado por Carolina González, jefe del Departamento de Agrobiodiversidad de AGROSAVIA. El evento contó con la participación de destacados panelistas, incluyendo a Kent Nnadozie, secretario del Tratado Internacional de Recursos Genéticos de la FAO, y expertos de Perú y Colombia.
La ministra de Agricultura y Desarrollo Rural, Martha Carvajalino, afirmó que “esta adhesión al TIRFAA significa para Colombia consolidar la Reforma Rural Integral, ya que no solo se trata de distribuir la tierra de manera equitativa y justa, sino también de distribuir el valioso recurso de la semilla. Nuestros campesinos y comunidades indígenas han sabido conservar y utilizar sosteniblemente estas semillas”.
Al unirse al Tratado, Colombia asegura un acceso preferente a variedades de semillas de los países miembros, promoviendo la cooperación e intercambio que permitirá el desarrollo de cultivos adaptados a las condiciones locales. Esta colaboración es especialmente relevante frente a desafíos como la desnutrición, el cambio climático, y los altos costos de producción.
El TIRFAA también fomenta el desarrollo de la economía campesina y familiar, al incentivar la investigación colaborativa entre comunidades indígenas y centros de investigación. A través de este Tratado, Colombia podría recibir recursos del Fondo de Distribución de Beneficios y participar en programas de transferencia de tecnología, mejorando así la seguridad alimentaria y la rentabilidad de los cultivos.
Carolina Navarrete Frías destacó que «Colombia podrá beneficiarse de los instrumentos internacionales que apoyan el desarrollo rural equitativo y sostenible. Esperamos seguir colaborando con el Gobierno Nacional en la implementación del Tratado».
Jorge Mario Díaz, director ejecutivo de AGROSAVIA, enfatizó que “la ratificación del TIRFAA es clave para la conservación y uso sostenible de los recursos fitogenéticos. Este tratado garantiza que las comunidades que custodian sus semillas participen activamente en la creación de sistemas agrícolas sostenibles y resilientes”.
Con esta adhesión, Colombia se posiciona como un actor comprometido en la conservación de la biodiversidad agrícola y la promoción de la seguridad alimentaria, en el marco de un esfuerzo global por un desarrollo rural equitativo y sostenible.