Bogotá tiene 512 moteles, de los cuales 150 han tenido que cerrar sus puertas y declararse en quiebra, pues a raíz de la pandemia que está atravesando el país no han podido seguir funcionando.
Las pérdidas de estos establecimientos ascienden a 30 mil millones de pesos mensuales, sin mencionar que las 12 mil personas que directamente emplean estos establecimientos se han quedado sin recibir sueldo desde marzo, cuando empezó la cuarentena.
Los moteles más afectados son los ubicados en los sectores de El Restrepo, La Sevillana y Venecia, tanto así que en sus fachadas no han tenido otra opción que publicar carteles declarándose en quiebra, pues no tienen cómo pagar impuestos ni servicios.
Sumado a esta crisis económica que atraviesa el gremio de moteles, se conoció una denuncia por parte de propietarios y administradores de estos sitios, quienes aseguran que varios hoteles están prestando su servicio por horas, tal como funcionan ellos.
Por su parte, Alvarado manifestó que se encuentran a la espera de la respuesta del Ministerio de Salud de su funcionamiento, que ojalá sea pronto, pues temen que tengan que seguir cerrando estos establecimientos y despidiendo personal.