El emisor anunció un incremento de 100 puntos básicos en la tasa de interés y la fijó en el 11 % como consecuencia de que «se agudizaron las condiciones financieras adversas que enfrenta la economía, causadas por factores globales «.
El Banco de la Republica incrementó el viernes su tasa de interés de referencia en 100 puntos base a un 11%, en línea con lo esperado por la mayoría del mercado, en busca de contener las expectativas de inflación que se encuentran desbordadas para este y el próximo año.
La decisión contó con el voto unánime de los siete miembros del directorio de la autoridad monetaria.
En un reciente sondeo de Reuters, 12 de los 14 analistas consultados anticiparon el alza en el costo del dinero, en tanto que un agente esperaba un alza de 75 puntos base y otro una de 50 puntos base.
Tras el incremento, la tasa se ubica en su nivel más alto desde julio del 2001.
«Este ajuste es consistente con una convergencia de la inflación en el mediano plazo a su meta de 3% y con un crecimiento económico sostenible», dijo el gerente del banco, Leonardo Villar, al leer un comunicado.
La inflación acumuló un 11,44% anual al cierre de septiembre, casi cuatro veces por encima de la meta puntual de largo plazo de 3%, nivel al que solo se regresaría más allá del 2023, según los analistas.
«Creemos que con esto por una parte se contribuye a consolidar una política macroeconómica muy sana que ha tenido esta semana muchas noticias positivas y que por otra parte mira hacia el año entrante obviamente en un contexto que esperamos que signifique una reducción de la inflación significativa», dijo el ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo.
El funcionario, que hace parte de la junta directiva del banco, aseguró que tanto el Gobierno como el Banco Central proyectan una inflación en torno al 7% para el próximo año.
PERSPECTIVA DE REDUCCIÓN DE LA INFLACIÓN
No obstante, Villar se abstuvo de confirmar el pronóstico de inflación del equipo técnico, que se conocerá el lunes de la próxima semana.
«Obviamente las proyecciones se han ajustado y el impacto que puede haber tenido la depreciación de la tasa de cambio y las mayores inflaciones observadas en los dos últimos meses cambian las proyecciones que el equipo técnico va a presentar para este año», dijo Villar.
«Pero persiste la perspectiva de un proceso importante de reducción de la inflación el año entrante y de convergencia en un plazo del orden de dos años hacia la meta de 3%», agregó.
Con el alza del viernes, el Banco Central acumula un incremento de su tasa de interés de 925 puntos básicos desde que inició el actual ciclo, en septiembre del año pasado.
Mientras, Ocampo afirmó que el Banco Central mostró un informe en el que se determinó que los mercados de futuro cuentan con una liquidez adecuada.
«La percepción de que de pronto había problemas de liquidez en los mercados cambiarios de futuros no se confirmó», aseguró.
Por su parte, Villar resaltó que, a pesar de la desaceleración económica prevista, el equipo técnico del banco mantiene sus pronósticos de crecimiento de un 7,9% para este año y de un 0,5% para 2023.
Adicionalmente, Villar anticipó una reducción en el déficit de cuenta corriente de la balanza de pagos previsto para el 2023.
«Se prevé una reducción importante del déficit en cuenta corriente para el año entrante, el cual se ubicaría ya no en el 6% del PIB que se observaría este año, sino en niveles inferiores al 4% del PIB el año entrante, lo cual facilitaría de manera importante su financiación, que se da fundamentalmente a través de inversión extranjera directa», concluyó.
(Reporte de Nelson Bocanegra. Editado por Luis Jaime Acosta) /Reuters