El tribunal de paz calificó los hallazgos en esta región como crímenes masivos, generalizados y persistentes. Según informó la JEP, estas desapariciones forzadas habrían sido ejecutadas principalmente por los frentes 18, 36 y 5 de las antiguas Farc, grupos paramilitares, Bloque Mineros y Bloque Metro, y también por unidades de la fuerza pública.
Luego de ampliar información, por parte de seis fuentes nacionales, se determinó el número de víctimas de desaparición forzada. Entre el Centro Nacional de Memoria Histórica, la Fiscalía General de la Nación y sus respectivos sistemas de información SIJUF, SIJYP y SPOA, la Unidad de Atención a Víctimas (UARIV) y la Comisión de Búsqueda de Personas Desaparecidas (CBPD) establecieron la lamentable cifra de víctimas del conflicto en el país que ha alcanzado los 2.094 registros este año. Según la JEP, recientemente fueron hallados ocho restos más, que presentaron signos de muerte violenta. Aún así, los cuerpos de estas personas no han logrado ser identificados.
Durante la Sección de Ausencia de Reconocimiento (SAR), la JEP informó que en la zona de Hidroituango, estas 2.094 víctimas de desaparición forzada se perpetraron en los municipios de Ituango, Briceño, Peque, Cáceres, Nechí, Toledo, Sabanalarga, Tarazá y Valdivia.
En su gran mayoría, las entidades establecieron que las muertes de las víctimas fueron violentas ya que los cuerpos presentaron heridas con arma de fuego, disparos en el cráneo compatibles con ejecución en posible estado de indefensión. «En esta región este gravísimo crimen fue masivo, generalizado y persistente, al mismo tiempo que, sin duda, lesionó en grado sumo a las comunidades » ‘, informó el Auto de la Jurisdicción Especial para la Paz.
📃2.094 personas fueron víctimas de desaparición forzada en el área de influencia de Hidroituango.
✅La JEP reportó nuevos hallazgos en el marco del trámite de las medidas cautelares en el área de influencia de la represa.#COMUNICADO: https://t.co/JUoV1vo37W pic.twitter.com/KEKDQsmKYD
— Jurisdicción Especial para la Paz (@JEP_Colombia) December 9, 2020
Las desapariciones forzadas, tuvieron un considerable incremento en el país a partir del primer semestre del año 1996 con la llegada de las AUC en Antioquia, especialmente en los municipios de Cáceres y Tarazá (que concentran cerca del 50% de las víctimas). El pico más alto se registró durante los años 2001 y 2002, años en los que desaparecieron al menos, 358 ciudadanos.
Por otra parte, la JEP también comunicó (junto con el reporte total de víctimas) que fueron encontrados en el Laboratorio de Osteología de la Universidad de Antioquia ocho cadáveres del Cementerio de Orobajo (Sabanalarga) en la zona inundada por la represa. Los cuerpos mostraban signos de muerte violenta de personas no identificadas, indicando que se podría tratar de los cuerpos de otras víctimas de desaparición forzada en esa zona.
Estos ocho cuerpos se suman a los 176 exhumados a lo largo de los últimos años por la Fiscalía, en los municipios del área del proyecto de Hidroituango.
Entre tanto, la JEP informó que ha avanzado en las prácticas de prueba para comparar la información recopilada relacionada con la existencia de cementerios en el área afectada del proyecto Hidroituango, incluida la inspección fluvial y del aire, así como el de los ríos en el área afectada.
Sumado al hallazgo de los ocho cuerpos en Orobajo, la entidad comunicó que en la última inspección forense, fueron hallados cinco cuerpos más, que se suman a los tres encontrados durante el primer semestre de este año, y lo que lleva a que la JEP investigue posibles irregularidades en su traslado y manejo.
Lorena Garcés García – Humana Noticias | Foto portada: (Getty Images)