- El sector del cine italiano protestó contra la decisión tomada por el primer ministro del país, Giuseppe Conte, de volver a cerrar los cines, teatros y salas de conciertos con la finalidad de contener una segunda ola de contagio del coronavirus.
En varias ciudades de Italia, se han registrado protestas contra el decreto que ha tomado el gobierno, para detener un segundo brote de Coronavirus. El decreto estipula el cierre de algunos centros sociales como cines y teatros, así como recortes de horario para restaurantes y bares. Algunas de estas protestas han desatado actos vandálicos y enfrentamientos con el cuerpo policial.
Luego de que la pandemia contagiara a más de 500.000 personas en Italia, y donde fallecieron más de 37.000, cientos de ciudadanos marcharon por las calles de Milán para protestar por las nuevas restricciones impuestas por el gobierno. Los enfrentamientos generaron momentos de tensión cuando algunas personas lanzaron bengalas y petardos contra la Policía.
La mayoría de los manifestantes se cubrieron el rostro y se concentraron en la sede de la región de Lombardía, allí, arrojaron piedras, botellas y petardos. Algunos de los manifestantes se trasladaron a la sede de la región para pedir la dimisión del presidente, Vincenzo de Luca.
El decreto gubernamental, que entró en vigencia el día de hoy para frenar los contagios del Covid-19, anunció que bares, restaurantes, heladerías y pastelerías podrán permanecer abiertos solo de 05:00 am a 6:00 pm.
Los hechos de violencia fueron condenados por el presidente y otros altos funcionarios quienes conjuntamente expresaron: ´´a participación de miles de personas pacíficas, que expresaron su disconformidad de manera civil y serena” y “unos alborotadores, que nada tienen que ver con ellos, y que han “tratado de envenenar el clima alimentando tensiones innecesarias”.
Muchos directores de cine y asociaciones cinematográficas escribieron al primer ministro del país Giuseppe Conte y a Dario Franceschini, ministro italiano de Cultura, criticando esta medida expresada a la ciudadanía italiana, «puede poner en peligro el futuro de toda la industria». Durante una entrevista publicada por el diario La República, el director Marco Bellocchio comentó: «Incluso bajo las bombas, durante la Segunda Guerra Mundial, el cine no se detuvo, la gente continuó yendo al cine».
La medida también incluye el cierre de centros culturales, centros sociales, centros de entretenimiento, salas de bingo, casinos, parques de diversiones, gimnasios, piscinas y spas; mientras que las áreas de juego y jardines permanecerán abiertos.
Según medios italianos, durante los enfrentamientos, un policía resultó herido y dos manifestantes fueron detenidos, mientras que en Turín se registraron diez detenciones.
Lorena Garcés García – Humana Noticias | FotoPortada: EFE Forbes