Después de tres días de protesta, los afiliados de la Nueva EPS en Cali han decidido levantar el plantón que mantenían frente a la sede de la Superintendencia Nacional de Salud (Supersalud). La manifestación, que inició el 19 de marzo, buscaba soluciones inmediatas a la suspensión en la entrega de medicamentos y la atención médica deficiente que venían padeciendo los usuarios.
Origen del conflicto
La problemática surgió el 21 de febrero, cuando Audifarma, el gestor farmacéutico encargado de suministrar medicamentos a los afiliados de la Nueva EPS en los departamentos de Valle del Cauca, Eje Cafetero y Nariño, suspendió sus servicios de manera abrupta. Esta decisión incumplió el acuerdo de desmonte progresivo pactado previamente con la EPS, generando un desabastecimiento que afectó a miles de usuarios.
A pesar de que la Supersalud emitió una medida cautelar el 7 de marzo para garantizar la continuidad en la entrega de medicamentos, las dificultades persistieron, llevando a los afectados a tomar medidas de protesta.
Desarrollo de la protesta
Durante la manifestación, se destacó la presencia de madres de niños con enfermedades huérfanas, quienes denunciaron la falta de medicamentos esenciales para el tratamiento de sus hijos. Además, los usuarios reportaron largas filas de hasta 12 horas para recibir sus medicamentos, lo que evidenció la gravedad de la situación.
Intervención de la Supersalud y acuerdos alcanzados
La Supersalud actuó como mediadora entre la Nueva EPS, la Personería de Cali, la Asociación de Personeros del Valle, la Secretaría de Salud y el nuevo gestor farmacéutico, Disfarma. Tras varias reuniones, se lograron los siguientes compromisos:
- Extensión de horarios: Los puntos de dispensación de medicamentos ampliarán su atención de 6:00 a.m. a 11:00 p.m. para agilizar la entrega.
- Servicio domiciliario: Se implementará la entrega de medicamentos a domicilio para pacientes con movilidad reducida o condiciones especiales.
- Refuerzo en la dispensación: Se habilitarán puntos adicionales de Farmar durante el fin de semana del 22 de marzo para mejorar la cobertura.
El superintendente de Salud, Giovanny Rubiano García, instó a todas las EPS a supervisar rigurosamente sus contratos con los gestores farmacéuticos para evitar situaciones similares en el futuro. Por su parte, las madres de niños afectados expresaron su esperanza en que estos acuerdos se cumplan y no se repitan las deficiencias en la atención.
La resolución de este conflicto en Cali refleja la importancia de una supervisión efectiva y una comunicación transparente entre las entidades de salud y sus usuarios. Se espera que los acuerdos alcanzados mejoren la calidad del servicio y garanticen el derecho fundamental a la salud de todos los afiliados.
FotoPortada: Cortesía de Luciano Calderón.