En la mañana de este lunes 16 de junio, Miguel Uribe Turbay, senador y precandidato presidencial del Centro Democrático, fue sometido a una cirugía de urgencia en la Fundación Santa Fe de Bogotá debido a un sangrado intracerebral agudo. El procedimiento fue motivado por la aparición de nuevos signos clínicos y hallazgos en imágenes diagnósticas que evidenciaron la gravedad del cuadro, obligando al equipo médico a intervenir de inmediato para controlar los posibles daños neurológicos y preservar la vida del dirigente político.
Antecedentes del atentado y evolución médica
Uribe Turbay, de 39 años, permanece en estado crítico desde el pasado 7 de junio, cuando fue víctima de un atentado sicarial durante un acto público en el barrio Modelia, occidente de Bogotá. En ese ataque recibió dos disparos en la cabeza y uno en la pierna izquierda, lo que desencadenó una serie de complicaciones médicas que han requerido múltiples intervenciones quirúrgicas y un manejo intensivo en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) de la Fundación Santa Fe.
Desde su ingreso, el senador ha sido sometido a varias cirugías, incluyendo una craniectomía descompresiva y procedimientos complementarios para controlar la presión intracraneal y el edema cerebral. Los reportes médicos iniciales indicaban una leve mejoría, pero el pronóstico se mantuvo siempre reservado debido a la complejidad de las lesiones.
La urgencia de la nueva intervención
La madrugada de este lunes, tras una evaluación tomográfica cerebral, los especialistas detectaron un nuevo sangrado intracraneal. De inmediato, Uribe Turbay fue trasladado nuevamente a quirófano para una intervención neuroquirúrgica de urgencia. El parte médico, firmado por el doctor Adolfo Llinás Volpe, director médico de la Fundación Santa Fe, señala que el paciente permanece “hemodinámicamente estable”, pero su “condición clínica sigue siendo crítica, con pronóstico neurológico reservado”.
La familia del senador, a través de un comunicado, pidió a la ciudadanía oraciones y apoyo ante la delicada situación. Afuera del centro médico, centenares de ciudadanos se han congregado en muestras de solidaridad y esperanza por la recuperación de Uribe Turbay.
El atentado contra Miguel Uribe Turbay ha generado una ola de solidaridad nacional y un fuerte rechazo a la violencia política. El domingo, miles de ciudadanos participaron en una “Marcha del Silencio” en Bogotá y en más de veinte ciudades del país, exigiendo justicia y respeto por la vida de los líderes políticos.
Las autoridades han avanzado en la investigación, logrando la captura de tres personas presuntamente implicadas en el ataque: el autor material, un menor de 15 años que portaba el arma utilizada, y dos adultos identificados como Carlos Eduardo Mora González y Katerine Andrea Martínez. La Fiscalía ha imputado cargos por tentativa de homicidio agravado, fabricación y porte ilegal de armas, y uso de menores en la comisión de delitos.
La gravedad del atentado y la situación médica de Uribe Turbay han puesto en el centro del debate la seguridad de los líderes políticos y la necesidad de fortalecer las garantías democráticas en el país. Diversos sectores han expresado su preocupación por el uso de menores en actividades criminales y por el aumento de la violencia durante la campaña electoral.
El Senado de la República tenía previsto un debate de control político sobre Ecopetrol, citado por el propio Uribe Turbay, que ahora queda en suspenso mientras se espera la evolución de su estado de salud.
Hasta el cierre de este boletín, Miguel Uribe Turbay permanece en la Unidad de Cuidados Intensivos, bajo monitoreo permanente y con atención subespecializada en neurología. El equipo médico continúa evaluando su evolución, pero el pronóstico neurológico sigue siendo reservado. La Fundación Santa Fe ha reiterado que cualquier cambio significativo será comunicado oportunamente a la opinión pública.
“El paciente Miguel Uribe Turbay requirió traslado hace unos minutos a salas de cirugía para intervención neuroquirúrgica de urgencia por evidencia clínica e imagenológica de sangrado intracerebral agudo”, señala el comunicado oficial de la Fundación Santa Fe.