El presidente electo de Colombia, Gustavo Petro, se reunió este miércoles con su principal opositor político, el exmandatario y líder de la derecha Álvaro Uribe, quien anunció que desde la oposición apoyará las iniciativas para combatir la pobreza siempre y cuando no afecten el sector productivo.
Fue el primer encuentro cara a cara en la historia reciente entre los dos dirigentes políticos que han mantenido diferencias públicas y contradicciones sobre temas sensibles como la seguridad y el modelo económico.
Petro, un economista de 62 años que se convertirá en el primer presidente de izquierda en Colombia, se comprometió en campaña a reducir la pobreza en la que viven casi la mitad de los 50 millones de habitantes del país con ambiciosos programas sociales y económicos que han despertado temor en los mercados e inversionistas.
«La conversación con el expresidente Uribe fue provechosa y respetuosa. Encontramos las diferencias y los puntos comunes. Siempre habrá un dialogo gobierno-oposición» dijo en su cuenta de Twitter Petro, quien fue alcalde de Bogotá y en su juventud militó en la desmovilizada guerrilla del M-19.
Petro propuso un acuerdo nacional para lograr la aprobación en el Congreso de las reformas económicas y sociales que en su concepto necesita el país para superar la pobreza, la desigualdad y la exclusión.
El mandatario electo, que no tiene una mayoría en el Congreso, logró que la Alianza Verde apoye a su gobierno en el legislativo, mientras que otras fuerzas políticas como el Partido Liberal anunciaron recientemente su disposición de respaldar las iniciativas de Petro en el Senado y en la Cámara de Representantes.
«Expresamos que compartimos todo el esfuerzo que se haga para que este país acelere la superación de pobreza, pero que eso no puede ser a costa de marchitar el sector privado y que esa política se volvería insostenible y nos llevaría a más pobreza», declaró Uribe en una conferencia de prensa.
El Centro Democrático, el partido de Uribe, pasó de ser la primera fuerza política en el Senado a la cuarta después de las elecciones legislativas de marzo en la que perdió varios escaños.
Uribe, quien gobernó a Colombia dos periodos consecutivos entre 2002 y 2010, dijo que el diálogo con Petro fue franco y respetuoso e incluyó temas como la salud, la reforma al sistema de pensiones, el subsidio para los ancianos pobres, la seguridad, el microtráfico, la transición energética y la paz.
Frente a la propuesta de Petro de subir los impuestos a las personas más ricas y a los dividendos de las empresas, Uribe insistió en que no se debe afectar al sector productivo que es una importante fuente de empleo y es clave para superar la pobreza.
«Yo le dije humildemente presidente, permítame un canal de diálogo con usted, yo no lo molestaré mucho, será para hablar sobre temas de país. Lo que podamos aprobar lo haremos sin cálculos», concluyó el expresidente Uribe.
Redacción Luis Jaime Acosta/Reuters